DEL FORDISMO AL POSFORDISMO CONSECUENCIAS SOCIO-CULTURALES Y ECONÓMICAS
Del trabajo como ente alienador al trabajo como forma estructurante de la vida social.
Indice
Primera Parte
1.-Organización del trabajo basada en el "Savoir Faire"-
1.1-El Oficio y sus características-.
2.-La organización científica del trabajo. (OCT):
2.1-Evaluación del taylorismo, perspectiva histórica y su relación con el Oficio.
Soluciones propuestas por Taylor para eliminar el tiempo muerto e intensificar el trabajo
2.2 Características de la Organización Científica del Trabajo (OCT)
2.3-Principales resultados de la aplicación de la OCT a nivel de las empresas.
3.-Fordismo
3.1.- Perspectiva histórica .Superación del Taylorismo con las técnicas de Ford
3.2.-Origen del Fordismo - Perspectiva histórica.
3.3. Características del Modelo de Producción Propuesto por Henry Ford.
3.4-Las influencias del Fordismo en las normas de vida de sus trabajadores
4.-El papel y el lugar del Fordismo en la crisis de 1930. La introducción de un nuevo sistema de producción.
5.- Fordismo. Su aplicación en Estados Unidos y Europa.
6.-Análisis comparativo: Taylorismo y Fordismo.
6.1.-Diferencias entre la organización taylorista y la organización destinada a la producción en masa.
6.2.- Similitudes entre Taylorismo-Fordismo
7.-Comienzo del Final. Declinación del Modelo de producción Fordista.
Segunda Parte
8.-Cambios en el modelo de producción taylorista-fordista y sus consecuencias político-económicas y sociales en un mundo en proceso de transformación.
Tercera Parte
9.-Nuevas Procesos en los modos de Producción –Posfordismo y sus diferentes derivaciones-.
9.1.- Fragmentación del Proceso Productivo.
9.2.- El Modelo "Toyotista". Sus orígenes y características.
9.3.- Consecuencias del Modelo Productivo JIT en el nuevo contexto social y productivo.
9.4.- ¿"Calidad Total" o fomento del despotismo contra si mismo y sus semejantes?
9.5.- Heterogeneidad, complejidad y fragmentación de la clase trabajadora. La influencia de la Educación en este proceso.
Cuarta Parte
10.-Conclusiones.
11.-Bibliografía
Introducción
¿Cómo pueden perseguirse objetivos a largo plazo en una sociedad a corto plazo?
¿Cómo sostener relaciones sociales duraderas?
¿Cómo puede un ser humano desarrollar un relato de su identidad e historia vital en una sociedad compuesta de episodios y fragmentos?
El capitalismo de corto plazo amenaza con corroer el "carácter" en especial de aquellos aspectos que unen a los seres humanos entre sí y brindan una sensación de un Yo sostenible.
Veremos a continuación porque enunciamos y sostenemos que el cambio que se da en relación a la significación del valor del trabajo desde su aspecto alienante a su aspecto estructurador de normas de vida del sujeto posmoderno es una evolución y no solamente una "jaula de hierro" que lo aprisiona y ahoga.
Primera Parte
1.-Organización del trabajo basada en el "Savoir Faire"-
1.1-El Oficio y sus características-.
A principios del siglo XIX la organización y contenido del trabajo en Estados Unidos estaba basado en el "savoir faire" del obrero, quien poseía el conocimiento del oficio transmitiendo sólo a sus descendientes los trucos del mismo. Este oficio sería institucionalizado por el sistema de corporaciones, que se encargaría de regular la actividad de los talleres y de los trabajadores, quienes trabajaban con cierto margen de autonomía y sin una división social entre concepción y ejecución del trabajo.
Así entonces el oficio era "la piedra angular"(1) sobre la cual se constituirá la organización obrera, que se agrupaba en la American Federation of Labor (AFL), conformada por un conjunto más o menos estructurado y homogéneo de uniones profesionales.
La posesión de los conocimientos del oficio permitía al trabajador disponer de cierta autonomía para dirigir, regular y controlar él mismo el proceso de trabajo y fijar el tiempo asignado a cada operación.
La afiliación a la AFL le garantizaba el pago por parte de los empresarios de una determinada tarifa por su trabajo, que era estrictamente establecida por el sindicato.
Los obreros no especializados los "Unskilled"(2) son excluidos de la asociación (AFL) quien hace a la vez de subcontratista , asegurando una cierta gestión del mercado del trabajo obrero por cuenta de los fabricantes; garantizando el aprovisionamiento en fuerza de trabajo, administra la afluencia en cantidad y cualidad. La contrapartida exigida es que el fabricante respete la "tarifa" sindical (esta incluye la tasa salarial y el tiempo de producción)
1.2-El Oficio como detenedor del progreso industrial
El trabajo de oficio era entonces el principal límite a la expansión capitalista, pues para poder desarrollar el proceso de trabajo en su fábrica el empresario dependía estrictamente del trabajo de este obrero calificado, actividad que no podía ser codificada ni sistematizada. Era así imposible para el empresario controlar el proceso productivo y regular sus tiempos muertos.
1.2.1-Prácticas Pre-Tayloristas de lucha contra el oficio.
Para luchar contra el oficio el capital buscó, en primer lugar, hacer el trabajo más productivo a través de la máquina, medida que fue fuertemente resistida por los obreros calificados. Ante esta situación los empresarios incentivaron el trabajo de los niños y de las mujeres, que aseguraban la continuidad del flujo industrial y resultaban más económicos. A pesar de esto, y como el oficio seguía siendo el gran problema, se comenzó a implementar el sistema de trabajo a destajo que fue, antes de Frederik Winslow Taylor, una de las fuerzas más eficaces utilizadas por los fabricantes para circunscribir el oficio.
Pero todas estas medidas no lograban recortar el poder que tenían los obreros sindicalizados.
Para hacer frente a la relativa escasez de fuerza de trabajo calificada que estuviera dispuesta a trabajar bajo nuevas condiciones laborales, era necesario un cambio en la gestión de la fuerza de trabajo, economizar esa fuerza de trabajo, "fijarla" en sus puestos dentro de los establecimientos industriales, disciplinarla y reducir el costo y el tiempo de formación profesional.
El importante flujo migratorio proveniente de países europeos a lo largo del siglo XIX y a principios del XX sería entonces la condición de posibilidad para alcanzar los objetivos que perseguían los capitalistas, pues esta fuerza de trabajo, que en muchos casos tenía escasa calificación para el trabajo industrial, sería incorporada en las fábricas reemplazando paulatinamente al obrero de oficio.
2.-La organización científica del trabajo. (OCT):
2.1-Evaluación del taylorismo, perspectiva histórica y su relación con el Oficio.
Soluciones propuestas por Taylor para eliminar el tiempo muerto e intensificar el trabajo.
El oficio mismo se constituía así en blanco de ataque, en obstáculo que será saldado con la aparición de la "Organización Científica del Trabajo" (OCT) propuesta por Frederick Winslow Taylor, quien se propone acabar con el oficio para circunscribir de esta manera el control obrero de los tiempos de producción.
Según Taylor "...como los obreros de todos los oficios han aprendido los detalles de su trabajo por la observación de los obreros ya formados que lo rodean, existen muchas maneras distintas de hacer la misma cosa (...), y por igual razón, hay una gran variedad en los implementos usados para cada clase de trabajo. Ahora bien: entre los diversos métodos y herramientas usados en cada trabajo, existe siempre un método y una herramienta más rápidos y mejores que los demás. Y ese mejor método y esa mejor herramienta sólo pueden ser descubiertos o perfeccionados a través de un estudio y análisis científico de todos los métodos y herramientas en uso, juntamente con un estudio exacto de los detalles, de los movimientos y del tiempo..."
Lo que diferencia a Taylor de sus predecesores es el hecho de haber constituido al oficio mismo en blanco de ataque, en obstáculo a salvar. No busca el medio de soslayarlo como hace la máquina, de estimularlo como se pretende mediante sistemas salariales cada vez más sofisticados, ni de dirigirlo contra sí mismo, como hace el sistema de destajos, sino el medio de destruirlo como tal.
El conocimiento y el control de los modos operatorios industriales son en principio propiedad exclusiva, monopolio de la clase obrera. Monopolio fraccionado entre diferentes profesiones pero monopolio al fin y lo esencial que los patronos están excluidos de él.
De la ecuación tayloriana obtenemos que quien domina y dicta los modos operatorios se hace también dueño de los tiempos de producción. En manos obreras, este "saber" práctico de fabricación se convierte, como dirá Taylor, en una "holganza sistémica" que paraliza el desarrollo del capital.
Doblegar al obrero de oficio, liberar al proceso del trabajo del poder que ejerce este sobre él para instalar en su lugar la ley y la norma patronales, tal será la contribución histórica del taylorismo.
2.2 Características de la Organización Científica del Trabajo (OCT)
Esta nueva "Organización Científica del Trabajo" presentaba según Taylor cuatro principios fundamentales que pueden resumirse de la siguiente manera:
Desarrolla para cada elemento del trabajo del obrero una ciencia que reemplaza los antiguos métodos empíricos.
Selecciona científicamente y luego instruye, enseña y forma al obrero; mientras que en el pasado éste elegía su oficio y se instruía a sí mismo de la mejor manera, de acuerdo con sus propias posibilidades.
Coopera cordialmente con los obreros para que todo el trabajo sea hecho de acuerdo con los principios científicos que se aplican.
Distribuye equitativamente el trabajo y la responsabilidad entre la administración y los obreros.
Así entonces la nueva organización del trabajo pretendía reducir el poder del trabajador de oficio y eliminar la supuesta vagancia que presentaba la clase obrera a partir de una organización empresaria que fuera esencialmente científica; es decir, a partir de los hechos, del razonamiento, de la experimentación y de la prueba.
Para alcanzar la consecución de estos principios fundamentales era necesaria la utilización de mecanismos y técnicas apropiadas, que pueden resumirse de la siguiente manera:
Estudio de tiempos y movimientos de las tareas manuales productivas o de tipo administrativo, de carácter repetitivo, para identificar los movimientos inútiles con el objeto de eliminarlos y de conservar los necesarios para que puedan realizarse en el transcurso de una jornada normal de trabajo y obtener así una remuneración adecuada.
Asignación por anticipado de tareas específicas a los trabajadores para que cada uno cumpla con las especificidades de cantidad y calidad utilizando los métodos y herramientas científicos.
La individualización del trabajo, oponiéndolo al trabajo grupal o en equipo, para que cada obrero trabaje a un ritmo más acelerado.
Estandarización de las tareas para realizarlas utilizando las máquinas y herramientas más adecuadas.
La selección científica de los trabajadores a través de la oficina de personal, eligiendo a aquellos que están en mejores condiciones objetivas para realizarlas de manera eficiente.
La formación profesional de los trabajadores en lugar del simple aprendizaje.
La opción por un sistema de remuneración según el rendimiento, determinando la prima y los montos de la remuneración para satisfacer el interés de los trabajadores por el dinero.
La determinación de los tiempos de reposo necesarios para evitar la sobre-fatiga que repercutiría finalmente en una baja de la producción.
El trabajo de ejecución manual o intelectual debe ser controlado y supervisado por parte de la dirección a través de un sistema de supervisión múltiple y funcional.
La medición objetiva del trabajo realizado, poniendo a disposición de los trabajadores directamente involucrados la información acerca de sus resultados.
El trabajo intelectual es separado del taller y es concentrado en oficinas de planificación y organización de la producción
El hombre queda sometido a la máquina, este se convierte en un apéndice de la máquina
La calificación del trabajo obrero se determina según el puesto de trabajo y no en función de la habilidad o el conocimiento técnico: las principales características exigidas por la empresa son velocidad y precisión.
Se intenta limitar al mínimo los tiempos muertos: tiempos ligados a la coordinación de los diferentes segmentos del proceso del trabajo y tiempos ligados a la reconstitución parcial de la fuerza de trabajo ( pausas e interrupciones debidas a la fatiga muscular o neuro-psíquica)
Se establece el salario pagado por pieza producida, lo que motivaría a los trabajadores a aumentar la producción.
La mecanización reduce el trabajo a un ciclo de actos repetitivos, definidos por las normas de rendimiento.
El orden y la armonía en la empresa y en la sociedad
Vemos así que partiendo del supuesto de que la dirección y los trabajadores tienen intereses comunes, Taylor elabora una nueva organización del trabajo basada fundamentalmente en tres pilares básicos:
Una división entre concepción y ejecución de la tarea, razón por la cual aparecen los departamentos de planificación y de personal de la fábrica.
Una fragmentación y especialización de las tareas, pues a partir del estudio de tiempos, movimientos y herramientas, la dirección de la empresa intenta codificar y sistematizar el trabajo obrero, para poder intensificarlo y aumentar así la productividad, reduciendo el tiempo muerto y la porosidad de la jornada del trabajo.
Establecimiento de un nuevo sistema de remuneración, basado en la productividad, en el rendimiento personal y no grupal del trabajador.
Desde el punto de vista del trabajo concreto la novedad introducida por el Scientifi Management se refiere ante todo al hecho de que el control obrero de los modos operatorios es sustituido por lo que se podría llamar un "conjunto de gestos" de producción concebidos y preparados por la dirección de la empresa y cuyo respeto es vigilado por ella. Este conjunto de gestos, al principio locales y empíricos, por depender de las medidas de los crono- analizados- llegará progresivamente, con la puesta a punto de las tablas de tiempos y movimientos elementales, a la categoría de un código general y formal del ejercicio del trabajo industrial. Lo importante es que con la puesta a punto de este código se asegura la integración progresiva de los trabajadores no especializados en los puestos de los profesionales de oficio, lo que provoca, con la transformación realizada en las condiciones del ejercicio del trabajo, un cambio en la composición de la clase obrera requerida. El diseño y la implementación de este código general se transformaría entonces en el denominado "one best way", es decir la única mejor manera de realizar cada tarea mediante el trabajo, la fabricación y utilización de las herramientas mas apropiadas.
Desde el punto de vista del trabajo abstracto se aseguraba un formidable aumento de rendimiento y de la intensidad del trabajo; la aplicación de la Organización Científica del Trabajo permitía entonces aumentar la productividad del trabajador, de las herramientas y del tiempo de trabajo necesario, eliminando la dependencia del trabajador de oficio, contribuyendo así a reproducir y acrecentar el régimen de acumulación capitalista. La aplicación de la OCT a nivel de las empresas permitía aumentar el margen de ganancia de los empresarios y los salarios de los obreros que cumplieran con las normas de productividad establecidas por la dirección.
El taylorismo rompía así con el oficio, con el trabajo y la solidaridad grupal, incentivando el desarrollo de trabajadores individualistas que sólo se preocupaban por aumentar su rendimiento para ganar la prima correspondiente. La entrada de los "Unskilled" en el taller no es sólo la entrada de un trabajador objetivamente menos caro, sino también la entrada de un trabajador no organizado, privado de capacidad para defender el valor de su fuerza de trabajo.
La organización del trabajo dentro de las firmas sufría de esta forma una importante transformación que permitía en definitiva un alargamiento de la duración de la jornada. Con la reducción de los tiempos muertos se propiciaba así un cambio en las condiciones sociales de extracción de plus-trabajo.
En la medida en que inaugura un nuevo modo de consumo productivo de la fuerza de trabajo obrera, la nueva Organización Científica del Trabajo de Taylor contribuye a un aumento de manera formidable la tasa de explotación y la valorización de capital instaurando una nueva modalidad de acumulación capitalista.
Los salarios serían estimados por rendimiento del trabajador, razón por la cual, si tenemos en cuenta el aumento de productividad de cada trabajador gracias a la Organización Científica del Trabajo que estaríamos implementando, los salarios representativos del promedio aumentarían considerablemente bajando además la cantidad de horas necesarias para realizar una misma tarea; produciéndose una especie de deslizamiento ya que de un simple instrumento de estímulo el salario se convierte en instrumento de reproducción del trabajador.
2.3-Principales resultados de la aplicación de la OCT a nivel de las empresas.
Si lográramos la implementación de la Organización Científica del Trabajo podríamos pensar, siguiendo a Taylor, que tanto los obreros como la empresa se beneficiarían de la nueva organización del trabajo.
Los beneficios obtenidos por los trabajadores serían los siguientes:
Percibirían salarios superiores a los que recibían anteriormente.
Disminuirían sus horas de trabajo, y aumentarían los tiempos de descanso.
Aumentaría el cuidado que cada trabajador recibiría por parte de la empresa, pues estarían acompañados y apoyados continuamente por instructores que les explicarían como realizar el trabajo de una mejor manera y en un tiempo menor, considerando así al obrero como un trabajador profesional que debía ser formado continuamente.
Los beneficios obtenidos por la empresa serían por su parte:
Una mejora sustancial del producto fabricado.
Una reducción material en el costo de inspección, porque al estar estandarizadas las tareas, el gasto que la empresa antes tenía en inspectores sería disminuido considerablemente.
Relaciones más amistosas con los obreros, pues estos al recibir un sueldo mayor cambiarían su mala predisposición en relación a la dirección de la empresa y reducirían el número de huelgas que solían realizar.
3.-Fordismo
3.1.- Perspectiva histórica .Superación del Taylorismo con las técnicas de Ford
A principios del siglo XX en los Estados Unidos el número de inmigrantes europeos era considerable, entre ellos había alemanes, polacos, italianos, húngaros, moravos, lituanos, rumanos, chinos, irlandeses, e ingleses(3), que tendían a conformar asociaciones de residentes de cada nacionalidad en las que reproducían sus costumbres, su cultura, su religión, manteniendo así cierto aislamiento respecto de la cultura del país de acogida.
Estos inmigrantes eran quienes realizaban los trabajos de menor calidad, los que implicaban tareas peligrosas, pesadas, sucias no contando para si con protección social alguna (4) dado su bajo nivel de calificación profesional, su falta de experiencia y su problemas lingüísticos quedando para esta parte de la población las actividades laborales con malas condiciones de trabajo y peor remuneradas.
Esta segmentación reforzaba así su tendencia hacia el rechazo a la integración social y a replegarse cada vez mas a la vida familiar y asociativa, situación que tenía consecuencias directas sobre el sistema productivo pues, dado que eran los inmigrantes quienes trabajaban en las industrias de la época y que esta población mantenía en vigencias sus propios calendarios, fiestas religiosas y patrióticas, etc.; los empresarios debían lidiar con altas tasas de ausentismo, de llegadas tarde, y de rotación. Esta situación significaba que las empresas debían contar con trabajadores adicionales para reemplazar las ausencias y la rotación de su planta de personal, hecho que generaba pérdidas económicas importantes porque estos trabajadores eventuales no conocían bien el funcionamiento de las máquinas y provocaban accidentes y averías, además de accidentarse.
Los principios tayloristas mantuvieron la hegemonía durante la primera mitad del siglo, a pesar de las dificultades que encontraban en esta población inmigrante.
Las cadenas de montaje- mecanización del trabajo- elemento con el cual se conjuga la teoría taylorista da origen al denominado Fordismo naciente de la mano de la industria automotriz.
3.-Una vez abolidas en sus países de origen las leyes contra la emigración 1825-1827 Inglaterra, 1848 Alemania, las clases dirigentes de esos países pensaron que era preferible dejar emigrar a los insurrectos a afrontar el riesgo de que reconstruyan sus foco rebeldes- Las colonias irlandesas se amontonaron en la costa este, Boston y New York y proporcionarán la primera reserva de mano de obra tan reclamada por el capital norteamericano siendo estos mano de obra amaestrada ya por el capital inglés.
4.- Ver Film " Pandillas De New York". Martin Scorsese.2002.-
3.2.-Origen del Fordismo - Perspectiva histórica.
Henry Ford, heredero y tributario del "scientific management" -de su protocolo central: el Time and motion study- es quien instala la primera Cadena de Montaje en 1913, creando con ello la producción en serie, que implica una mayor adaptación del trabajo humano al ritmo del conjunto del proceso de producción.
En esta, las diversas tareas en la línea de producción están coordinadas entre sí y son ejecutadas sin interrupción; fundamentalmente la utilización de la cinta transportadora elimina los desplazamientos del operario y marca los tiempos de su labor eliminando los "tiempos muertos" del taller convirtiéndolos en tiempos de trabajo productivos.
A las innovaciones del Taylorismo, Ford, añadió un mayor fraccionamiento de las tareas y formas más eficaces de imponer a los trabajadores el ritmo deseado de trabajo explotando al máximo las posibilidades de sustituir la habilidad personal del obrero por procedimientos mecánicos.
Este conjunto de transformaciones en el proceso del trabajo industrial implica cambios esenciales en los modos y condiciones de vida de los asalariados. Este modelo se caracteriza por engendrar como norma social – el consumo- el cual conduce a institucionalizar la lucha económica por intermedio de la negociación colectiva.
Como resultante de este proceso nos enfrentamos así a una forma de articulación entre el proceso productivo y el modo de consumo orientada a promover la producción y el consumo de masas fenómeno denominado como "Fordismo".
En tanto estructura macroeconómica (o régimen de acumulación o estructura social de acumulación) el Fordismo presuponía que los incrementos de productividad resultantes de sus principios de organización, tenían contrapartida por un lado, en el crecimiento de las inversiones financiadas por los beneficios y, por otro, en la ampliación del poder de compra de los trabajadores asalariados. De ello resultaba que la participación de los salarios en el valor agregado y el coeficiente del capital, en valores permanecía, a grosso modo, constantes; que la tasa de ganancia era, por lo tanto, más o menos estable, y que los mercados para los bienes de consumo y de capital se expandían paralelamente a la productividad.
En tanto sistema de reglas de juego (o en cuanto modelo de regulación), el fordismo presuponía el establecimiento de un contrato de largo plazo de relación salarial, con límites rígidos para los despidos y una programación de crecimiento del salario indexado por los precios y la productividad en general. Además de eso, una difundida socialización de la renta, por obra del Estado del Bienestar, aseguraba una renta permanente a los trabajadores asalariados. La contrapartida residía en la aceptación, por parte de los sindicatos, de las prerrogativas de la dirección. De esta forma, eran respetados, tanto los principios de la organización del trabajo como la estructura macroeconómica.
En este contexto Henry Ford tomando la experiencia del American System of Manufactures, es decir tomando aquellos elementos que consideraba importantes de este sistema basado en la utilización de máquinas- herramientas de propósitos especializados que pretendía obtener regularidad y la perfecta intercambiabilidad de las piezas utilizando plantillas y sistemas "jig, fixture and gauging" para lograr partes y piezas uniformes, implementó el conocido sistema de "Producción en Masa", que consistía en alcanzar un sistema que produjera un mayor volumen de producción, una política agresiva de ventas, una política de salarios particular y la incorporación de la innovación organizacional y técnica alcanzada a partir de la cinta transportadora en la cadena de montaje.
3.2.1-Relación entre H. Ford y G.W. Keynes: Nacimiento del Estado de Providencia.
Henry Ford y G. W Keynes popularizaron la idea de que la demanda debe ser tenida en cuenta, y que aquella, asociada a los asalariados, constituye las bases más estables de la demanda agregada. Las luchas de los trabajadores y los cambios políticos de los años '30 bajo la presidencia de Rosevelt y de las socialdemocracias europeas impusieron las nuevas reglas de juego. Los compromisos sociales de la época de Roosevelt se generalizaron en la Europa liberada y en el Japón vencido después de la Segunda Guerra Mundial, a raíz de la administración del Plan Marshall y del apoyo de los sindicatos americanos a sus congéneres europeos reformistas. Esta cruzada por el "american way of life" se vio fortalecida por las presiones a nivel nacional del movimiento obrero europeo, que introdujeron importantes mejoras en el modelo (por ejemplo la construcción del Estado-Providencia según las pautas del informe Beveridge).
El Estado se convierte en Estado –Plan , su resorte esencial su política del trabajo y el salario va a afirmarse cada vez mas claramente como tendente a un triple objetivo:
1-Fijación de un marco jurídico-legal consistente en un conjunto de reglas y normas sobre la misma relación de explotación (duración del trabajo, horas extraordinarias, trabajo de los niños, salario.) en el fondo se trata de poner al día y de reactualizar esta legislación de fábrica.
2- Instauración del salario indirecto- asignaciones familiares, enfermedad, jubilación- para repartir de otro modo los beneficios concernientes a las condiciones mercantiles y no mercantiles de reconstitución de la fuerza de trabajo con el fin de asegurar sobre una base duradera la existencia de la mano de obra barata que necesita la gran industria.
3- Estructuración enteramente nueva de la asistencia a los parados y accidentados, concebida ya no como una asistencia al más necesitado sino como un medio de incorporación y control de las fuerzas de trabajo coincidente en mantenerlas en reserva para la producción capitalista y el salariado.
El Estado-Plan Keynesiano construye así, entre policía y welfare, un nuevo terreno de legitimación, la garantía más firme por lo demás del mantenimiento del equilibrio y del nivel de la demanda efectiva. Este tipo de Estado aparece como el tipo de Estado exigido por la producción en masa, como el Estado de la producción en Masa.
El éxito del modelo de la Edad de Oro era "empujado", por lo tanto, por los salarios en el mercado interno de cada país capitalista avanzado tomado aisladamente. El condicionante exterior estaba limitado por la coincidencia del crecimiento en esos países, por la importancia restringida de la importancia del comercio internacional en relación al crecimiento de los mercados internos y por la hegemonía económica de los Estados Unidos.
3.3. Características del Modelo de Producción Propuesto por Henry Ford.
En cuanto al proceso de producción, el fordismo consiste en una serie de innovaciones mecánicas, tecnológicas y organizacionales que se articulan para la producción masiva en un flujo continuo.
Así entonces podríamos presentar al fordismo como un sistema que introdujo cambios en las anteriores normas de producción, de consumo y de vida, que se basó en:
Un diseño cuidadoso del producto, con el objeto de normatizarlo, utilizando partes y piezas uniformes y estandarizadas que sean intercambiables.
Una mejora progresiva de dicho diseño para lograr un mejor funcionamiento, pero sin cambiarlo sustancialmente.
La construcción o adaptación de máquinas herramientas con propósitos especializados para obtener piezas y partes estandarizadas absolutamente idénticas e intercambiables.
Una progresiva integración de la producción, eliminando la subcontratación y los proveedores.
La organización secuencial de la producción y del montaje de los subconjuntos, utilizando la cinta transportadora y la fuerza de la gravedad, para reducir al mínimo los movimientos y el esfuerzo humano.
La incorporación de fuerza de trabajo y sus cadencias al movimiento de las maquinas y de la cinta transportadora.
La división y simplificación social y técnicamente el trabajo de ejecución, promoviendo la especialización e incorporando las calificaciones a la máquina.
La modificación de las actitudes y comportamiento de los trabajadores disciplinándolos, actuando sobre sus normas de consumo y su modo de vida.
El incremento de los salarios, pagando según el tiempo de trabajo, para facilitar el reclutamiento de la mano de obra más adecuada, reducir la rotación y el ausentismo, compensar la intensificación del trabajo y frenar la acción sindical.
Se reduce al máximo la inmovilización improductiva del capital (aquí circulante) que se analiza en términos contables como un costo suplementario de almacenaje.
Se reducen los tiempos muertos de la fabricación antes necesarios antes cada nuevo aprovisionamiento.
Se han eliminado todas las detenciones del proceso de transformación que podían resultar de un defecto de ajuste, en calidad o en cantidad.
Vemos así que el nuevo sistema de producción consistía en un flujo continuo de producción, los "gravility slide", basados en el desplazamiento de objetos utilizando la fuerza de la gravedad sobre un plano inclinado; los "gravility rollers", basado en el desplazamiento por la fuerza de gravedad utilizando rodillos y finalmente la banda transportadora.
Gracias a este sistema Ford logra superar el problema de la escasa calificación de la mano de obra (5), pues se incorporaba la fuerza de trabajo y sus cadencias al movimiento de las maquinas y de la cinta transportadora, con lo cual no era necesaria la calificación profesional del obrero, ya que la calificación estaría ahora incluida en las máquinas.
La producción sería así constante y progresiva, ya que siguiendo una secuencia lógica se eliminaban los movimientos innecesarios, logrando no sólo una economía del tiempo como lo hacía el sistema taylorista sino también una economía del espacio. Con la cinta transportadora se pretendía llevar el trabajo al obrero, en lugar de llevar el obrero al puesto de trabajo.
3.4-Las influencias del Fordismo en las normas de vida de sus trabajadores
La modificación de las actitudes y comportamiento de los trabajadores fue otro de los resultados del fordismo; pues este sistema de producción trajo consigo cambios no sólo a nivel productivo sino también a nivel social.
En la empresa Ford se desarrolló así una nueva forma de gestión de la fuerza de trabajo con el objetivo de alcanzar un mejoramiento paralelo para lograr así un verdadero aumento de la capacidad productiva siendo necesario disciplinar al obrero, bajar los altos índices de ausentismo y rotación. Para solucionar este problema Ford decide implementar una política novedosa a nivel social que alcanzará no sólo a los trabajadores sino también a sus familias.
Asimismo, y considerando el aumento productivo que se alcanzaba con el nuevo sistema de producción, la empresa ensayó una estrategia novedosa para la época que consistía en que los mismos trabajadores pudieran comprar los Ford T que producían, logrando así ubicar en el mercado la gran cantidad de productos producidos. El nuevo sistema de producción en masa, consistente en la elaboración de miles de autos de un mismo modelo: el Ford T y un mismo color: negro, encontraba de esta forma un nuevo mercado, pues la clase trabajadora se transformaba ahora en un nuevo cliente potencial.
Así entonces, con el objeto de retener a la fuerza de trabajo y aumentar sus ventas para que estuvieran acorde a la nueva productividad, la empresa implementó en 1910 una política social que consistía entre otras cosas en:
El mejoramiento de las condiciones y medio ambiente de trabajo en los talleres.
El mejoramiento de la limpieza, iluminación e higiene en los locales.
La creación de escuelas gratuitas para los hijos del personal.
5.-Los puestos de trabajo son considerados como ni cualificados, ello es debido mas al hecho de que las categorías de trabajadores que los ocupan están incapacitados para "hacer valer" el valor de uso de la fuerza de trabajo que al carácter no cualificado de los trabajos que le son confiados
Apoyo a las actividades creativas, deportivas y culturales de las familias de sus empleados.
La creación de la escuela de aprendices, de comercio, de idiomas, con el objeto de que los trabajadores y sus descendientes se integraran a la sociedad estadounidense y se formaran en la cultura del trabajo.
A lo largo de la década de 1910 se implementaron además una serie de medidas que pretendían mejorar las condiciones monetarias de los trabajadores, entre ellas la más significativa fue la implementación del "five dollars day", es decir el pago de cinco dólares por día a cambio de sólo 8 horas de trabajo. Esto significaba un aumento considerable del sueldo de los obreros.
Con esta política se pretendió disciplinar a los trabajadores, aumentar la paz social, cambiar los valores culturales, etc. Con el "five dollars day" los trabajadores debían aprender a auto-controlarse y a adaptarse a las reglas de la sociedad en la que vivían; para alcanzar este propósito la empresa creo el Departamento de Sociología, el cual tenía como finalidad guiar a los trabajadores en cuanto a la utilización y el gasto de sus nuevos ingresos, muy elevados para su época. Por esta razón el Departamento de Sociología realizaba visitas en los domicilios de los trabajadores para orientarlos en sus comportamientos económicos, y sociales, con lo cual se esperaba que estos mejoraran paulatinamente su productividad.
La empresa le daba consejos a los trabajadores y a sus familias a través de los investigadores del Departamento de Sociología (creado por la misma empresa) que visitaban los domicilios de sus empleados para transmitirles la importancia de que fueran limpios e higiénicos, que tuvieran una situación civil en regla, que no tuvieran malos hábitos como beber en demasía o trasnochar, que fueran ahorrativos, y que no faltaran al trabajo ni llegaran tarde.
La idea de la empresa era que las condiciones generales de vida de sus trabajadores tenían efectos directos sobre su productividad durante la jornada de trabajo. Por esta razón era importante que cambiaran sus formas de vida y sus costumbres para adecuarse a la nueva cultura del trabajo fordista.
El "five dollars day" instaura mediante el control del gasto del salario, una influencia en las condiciones de existencia de la población obrera. En efecto, no todo el mundo podía beneficiarse del "five dollars day", este no incluía:
-A los obreros que no tengan por lo menos seis meses de antigüedad ( tiempo mínimo del período de prueba).
-A los jóvenes menores de 21 años.
-A las mujeres: Ford esperaba que las jóvenes se casen.
Además se exigía una "moral intachable", limpieza y reserva eran cualidades claves; estaban prohibido el uso de tabaco y del alcohol(6) también el juego estaba proscripto como estaba prohibida la frecuentación de bares, en particular bares de hombres.
Era fácil prever que cinco dólares diarios en manos de ciertos hombres podrían constituir un serio obstáculo en el camino de la rectitud y de la vida ordenada y hacer de ellos una amenaza para la sociedad en general; por eso se estableció desde un principio que no podría recibir este aumento ningún hombre que no supiera usarlo de manera discreta y prudente.
El "five dollars day" significa el triunfo de la cadena, no sólo en lo que esta implica desde el punto de vista de la repetitividad y de la parcelación del trabajo, sino como principio despótico que rige las condiciones de trabajo de los ejércitos de trabajadores que la sirven.
El Fordismo fue así un sistema productivo que trajo consigo cambios en el consumo y de las formas de vida de la población, la asistencia al estilo americano aparece claramente como un instrumento de regulación y control de las fuerzas de trabajo, donde unas instituciones para-públicas reemplazan a los sistemas patronales de seguro para complementar el dispositivo de reclutamiento que necesita el capital para asegurar su expansión. El rasgo nuevo e importante es que en adelante el sistema americano de ayuda pública se combina con el sistema de trabajo y lo refuerza. Al descargar a la industria de ciertas partes de los gastos de mantenimiento y reproducción de la clase obrera, sin dejar por eso de organizar una distribución lo bastante selectiva como para consolidar el sistema salarial, la ayuda pública contribuye a eliminar los obstáculos a su desarrollo que la gran industria había elegido en su propio camino al racionalizarse.
Los distintos componentes que abarca la Seguridad Social - accidentes-jubilación-enfermedad- van a entrelazar sus disposiciones para convertir la asistencia en un instrumento al servicio de la expansión de la gran industria, coincidiendo en asegurarle disciplina y sumisión de las fuerzas de trabajo. Estos sistemas se desarrollan en la gran industria y para la gran industria.
"Nuestro propio éxito depende en parte de los salarios que pagemos. Si repartimos mucho dinero se gasta…; de ahí que .esta prosperidad se traduce en un aumento de la demanda (de nuestros automóviles)"
H.Ford Ma vie, mon ouvre, p 142
4.-El papel y el lugar del Fordismo en la crisis de 1930. La introducción de un nuevo sistema de producción.
No se puede dejar de relacionar este hecho con las mutaciones en las condiciones de existencia de las clases obreras taylorianas y fordianas de la gran industria capitalista.
(6) Por esta razón rigió en EE.UU la llamada "Ley Seca" la cual prohibía la venta de todo tipo de bebidas alcohólicas
Al introducir en la base misma de los aparatos de producción unas diferencias acentuadas del rendimiento y productividad del trabajo, al acelerar la ruina de la pequeña industria , al alterar el modo de consumo y de reproducción de la clase obrera, al suscitar mediante el crédito y el consumo forzoso unos procesos en cadena de "seudo-validación" de las mercancías, la racionalización del trabajo , al nivel y en la escala en que se ha practicado, prepara el terreno de vulnerabilidad en el que unos hechos determinados van a provocar la ruptura brutal y en cascadas interrumpidas de los grandes equilibrios de la economía capitalista.
A nivel de las empresas produjo también cambios importantes pues logró disminuir el ausentismo y las altas tasas de rotación, redujo la cantidad de horas de trabajo diario, disminuyó la cantidad de trabajadores necesarios al mismo tiempo que aumentaba el volumen de la producción, facilitó el proceso de integración industrial, fabricándose en Ford la casi totalidad de las piezas que antes proveían los sub-contratistas.
El sistema de producción en masa lograba así dinamizar la economía del país, pues el fordismo era una nueva forma de regulación económica y de organización de la sociedad que significaba un cambio sustancial en el volumen de producción y en la política de ventas y de salarios, desarrollando una importante innovación organizacional y técnica a partir de la cinta transportadora en la cadena de montaje.
5.- Fordismo. Su aplicación en Estados Unidos y Europa.
Al analizar las diferencias existentes entre los países europeos, Italia en particular, y Estados Unidos en torno a las condiciones de posibilidad para el desarrollo del fordismo se sostiene que en Estados Unidos, a diferencia de Europa, esta nueva forma de organización de la sociedad fue posible gracias a la existencia de una escasa clase aristócrata parasitaria y al surgimiento de una clase empresarial que se encargó de racionalizar la producción y el trabajo combinando hábilmente la fuerza (destrucción del sindicalismo obrero de base territorial) con la persuasión (altos salarios, diversos beneficios sociales, propaganda ideológica y política muy hábil); logrando así hacer girar toda la vida del país alrededor de la producción.
6.-Análisis comparativo: Taylorismo y Fordismo.
6.1.-Diferencias entre la organización taylorista y la organización destinada a la producción en masa.
Como hemos visto anteriormente ambos sistemas productivos son esencialmente diferentes, aunque no necesariamente excluyentes, pues ambos pueden encontrarse o no en una misma unidad productiva.
Con respecto a las diferencias entre ellos podemos comenzar señalando que en materia de proceso productivo, el taylorismo consistía básicamente en un trabajo manual, mientras que en el fordismo el trabajo estaba concentrado básicamente en máquinas especializadas de propósitos múltiples, que funcionaban de manera continua. Así entonces el taylorismo perseguía la reducción de la porosidad de la jornada de trabajo a través de la intensificación del trabajo del obrero; mientras que el fordismo perseguía un aumento de la productividad a partir de la utilización de maquinaria especializada que funcionaba de manera continua.
Esto esta íntimamente relacionado con los diferentes sistemas de pago de salarios, pues mientras los trabajadores manuales de la fábrica de Taylor recibían un salario por rendimiento, los trabajadores de la empresa Ford recibían un salario por tiempo de trabajo que consistía en una jornada laboral de 8 horas diarias
.
El aumento en la productividad del trabajo fordista hacía posible entonces el pago de altos salarios que aseguraban la reproducción de la fuerza de trabajo en buenas condiciones
Por otro lado para modernizar la forma de organizar el trabajo e incrementar su producción ambas empresas hicieron estudios de tiempos y movimientos que presentaron también ciertas diferencias pues, mientras Taylor centró sus estudios en el trabajo humano para aumentar su intensidad, Ford enfocó su mirada sobre las máquinas tomadas como herramientas para incrementar su producción.
Con la cadena de montaje y la cinta trasportadora el fordismo lograba así disminuir aún más el tiempo muerto, que Taylor había empezado a reducir con la "Organización Científica del Trabajo".
El trabajo era en el fordismo llevado al obrero, mientras que en el taylorismo el obrero es llevado al trabajo; en este sentido, la diferencia es sustancial porque en la empresa fordista los trabajadores permanecen fijos en sus puestos de trabajo ya que la cinta transportadora les provee las partes que deben montar para fabricar el producto o bien desplaza el producto en curso de fabricación sobre el cual el obrero debe efectuar operaciones e insertar piezas o partes, mientras que en el taylorismo los trabajadores deben moverse debido a que no están fijos en su puesto laboral.
Las consecuencias laborales sobre la clase trabajadora son también diferentes pues mientras que en el taylorismo el esfuerzo físico y muscular resulta excesivo, en el fordismo la peor consecuencia observada es la importante carga mental que trae consigo.
Los problemas relacionados con la fuerza de trabajo son además esencialmente diferentes, pues mientras el taylorismo debe luchar con el obrero calificado y su organización sindical, el fordismo debe luchar contra la gran rotación y el ausentismo de la clase obrera inmigrante.
Asimismo, como señalamos anteriormente el fordismo puede ser entendido no sólo como un sistema productivo sino también como un sistema de organización particular de la sociedad, razón por la cual desarrolló un sofisticado sistema de supervivencia y control de la fuerza de trabajo, tanto dentro como fuera de taller, política que no fue implementada por el sistema de producción taylorista.
6.2.- Similitudes entre Taylorismo-Fordismo
En cuanto a las similitudes podemos sostener que ambos tomaron como fuerza de trabajo principal a los trabajadores inmigrantes europeos sin calificación que se encargarían de trabajar directamente en el proceso productivo. En relación a esto ambos sistemas contribuyeron a profundizar la división social y técnica del trabajo, pues en la línea productiva estaban los trabajadores no calíficados anteriormente mencionados mientras que los trabajadores calificados estaban situados fuera de ella, ya que se encargaban del realizar los estudios de tiempos y movimientos, de diseñar las nuevas formas de producción y los nuevos productos y supervisar las tareas de mantenimiento y reparaciones.
En líneas generales podemos señalar que ambos sistemas se inscriben en la misma trayectoria de valorización del capital. En el taylorismo la apropiación del excedente se logra incorporando más fuerza de trabajo, o intensificando el trabajo, gracias a la organización científica del trabajo o sea extrayendo plus valor absoluto; en el fordismo, la apropiación del excedente se alcanza en cambio introduciendo cambios en los procesos productivos y en los productos, incorporando la cadena de montaje, la cinta transportadora y racionalizando la producción, o sea incrementando la productividad y extrayendo plus valor relativo.
7.-Comienzo del Final. Declinación del Modelo de producción Fordista.
A partir de los años sesenta, este modelo de desarrollo económico comienza a ser cuestionado, ya que no engendra beneficios suficientes para repartir entre salarios y ganancias por lo cual se buscan otras formas de regulación que permitan revalorizar el capital. Una de ellas consiste en eludir la legislación social hasta entonces compatible con el crecimiento económico fordista en los países desarrollados, estableciendo industrias en otras áreas donde se pueda producir a bajo costo, lo cual conduciría a una nueva división internacional del trabajo.
La cadena de montaje – símbolo de la teoría tradicional, plantea graves problemas para su uso óptimo, el ejemplo utilizado de forma más convincente es el de las pérdidas por equilibrado; esto es los pequeños y parcelados tiempos perdidos de la cadena no sirven para nada.
La razón más evidente de su declinación surgió "del lado de la demanda". La competencia se igualó entre Estados Unidos, Europa y Japón. La búsqueda de economías de escala indujo a la internacionalización de los procesos productivos y de los mercados.
El aumento del precio de las materias primas importadas del Sur (el petróleo en especial) avivó la competencia por las exportaciones a principios de los años '70; la regulación del crecimiento de los mercados internos por vía de la política salarial, se vio así comprometida por la necesidad de equilibrar el comercio exterior.
Frente a esta crisis del "lado de la demanda", la reacción de las elites internacionales fue claramente keynesiana. La gran idea era coordinar (a través de la OCDE, el FMI, la Comisión Trilateral, las reuniones del grupo de los siete, etc.) la sustentación de la demanda mundial. Esta fue sin dudas, la línea adoptada por la primera cúpula económica de Rambouillet en 1975. Se verificó luego que las políticas efectivamente puestas en práctica no eran óptimas desde el punto de vista de la demanda. Pero, al menos, existía consenso respecto de la necesidad de ocuparse de la demanda efectiva. En verdad, el crecimiento del salario real disminuyó en forma espectacular, cada vez más empresas "mudaron" sus establecimientos hacia zonas no sindicalizadas o pasaron a subcontratar en países del Tercer Mundo y, aún así, las estructuras básicas del modo de regulación precedente fueron mantenidas en los países capitalistas avanzados.
No obstante hacia el final de los años '70, cambió la tendencia de las elites internacionales del mundo capitalista. La administración de la crisis por el "lado de la demanda" ciertamente había evitado una gran depresión. Surgió, con todo, un límite mayor: la caída de la rentabilidad. Esto era debido a diversas causas del "lado de la oferta": desaceleración de la productividad, crecimiento del precio total del trabajo (incluyendo el salario indirecto del Estado del Bienestar) aumento de la relación capital-producto y elevación de los precios relativos de las materias primas. En estas condiciones, las recetas keynesianas tales como el aumento del salario real (por limitado que fuese) y la flexibilidad monetaria tenían que producir inflación y la erosión del valor de reserva de la moneda, en especial de la moneda internacional: el dólar
Para algunos, la elevación del precio relativo del trabajo y de la materia prima fue considerada como resultado del prolongado "boom" de la Edad de Oro, la disminución de los beneficios surgía como resultado de la expansión precedente y de la situación de pleno empleo. Además el Estado de Bienestar había hecho bajar espectacularmente el "costo de la pérdida de trabajo", pudiendo explicar esto la desaceleración de la productividad.
Los beneficios eran muy bajos porque los trabajadores (y los exportadores de materias primas) eran muy fuertes; esto ocurría por ser excesivamente rígidas las reglas de juego, lo que dificultaba la reestructuración del aparato productivo, con el riesgo de perder las oportunidades ofrecidas por la revolución tecnológica. Este fue el análisis proclamado por "El Grupo de los Siete" de Venecia (1980) después del segundo aumento del petróleo. Se afirmó que "la primera prioridad" era combatir la inflación (más que el desempleo), mediante el compromiso de aumentar la productividad y redistribuir el capital de los Sectores en declinación, hacia aquellos en expansión, desde el Sector público al privado, y desde el consumo a la inversión. Se firmó el compromiso de "evitar las medidas de protección a los intereses particulares afectados por la severidad del ajuste". En otras palabras, romper los compromisos sociales "rígidos".
Esta política de "flexibilidad liberal" fue puesta en práctica por los gobiernos del Reino Unido, más tarde, de los Estados Unidos y finalmente por muchos países de la OCDE, inclusive por el gobierno socialcomunista francés. El repudio por los antiguos compromisos sociales alcanzó diversos grados y fue puesto en práctica en distintos frentes: desde las reglas de aumento salarial, con base en "inflación más productividad", hasta la cobertura y extensión de la seguridad social, desde la liberalización de los procesos de despido hasta la proliferación de los empleos precarios. Este proceso fue impuesto de manera autoritaria (gobierno y empresas se aprovecharon de la "oportunidad" de los fracasos sindicales o de las exitosas políticas de partidos conservadores) o a través de la negociación de concesiones entre capital y trabajo en un contexto de costo creciente de pérdida de empleo.
La experiencia de los años '80 no favoreció las tentativas más consecuentes de flexibilización liberal; Estados Unidos, Reino Unido y Francia... por el contrario, tales países experimentaron simultáneamente la desindustrialización y la profundización del déficit de su balanza comercial de bienes manufacturados. Los vencedores de la competencia (Japón, Alemania Occidental y la CEE) parecen caracterizarse por haber dado otra solución a la crisis de la oferta.
La eliminación de toda iniciativa por parte de los trabajadores involucrados en el proceso de producción aparece hoy como de dudosa racionalidad. Se trata de un buen método para asegurar a la administración el control directo sobre la intensidad del trabajo. Una mayor "autonomía responsable" por parte de los trabajadores directamente involucrados en la producción puede conducir a un principio de organización superior, sobre todo cuando se trata de poner en práctica nuevas tecnologías o métodos de gestión del circuito productivo del tipo "just in time" que presupone la participación de toda la inteligencia de los trabajadores y su cooperación voluntaria con la administración y los ingenieros. Y fue precisamente este el camino alternativo elegido por un gran número de importantes empresas del Japón, Alemania y Escandinavia.
La crisis llevó a un período de búsqueda de "nuevos paradigmas" industriales y de nuevas reglas del juego en la organización del trabajo asalariado.
La crisis del paradigma fordista no se debe al agotamiento técnico de un régimen de acumulación, sino al cuestionamiento de las propias bases de control de la relación salarial y de subordinación del trabajo vivo al trabajo muerto, del capital variable al capital fijo. La crisis es una crisis social, corresponde al desarrollo de un sujeto colectivo que se ha negado como fuerza de trabajo y como consumidor masificado, vaciado de toda cualidad y toda existencia autónoma salvo en su integración en el capital. Hay una continuidad que une la micro-conflictividad, el absentismo sistemático, el sabotaje (el rechazo del trabajo en la cadena) al deseo general de promoción social (lucha por la escolarización de masa) y de valorización del savoir-faire como medios de reapropiación de los mecanismos sociales de la producción y la reproducción. Estas dinámicas subjetivas son portadoras de un nuevo modelo cultural, basado en una "intelectualidad" de masa, que concibe el trabajo asalariado como un horizonte limitado y limitador de su existencia y sus aspiraciones
Segunda Parte
8.-Cambios en el modelo de producción y sus consecuencias políticas, económicas y sociales en un mundo en proceso de transformación.
En las últimas dos décadas, en la economía mundial se han desarrollado un conjunto de fenómenos que se suelen agrupar bajo los nombres de "globalización" o "mundialización" del capitalismo. Todo parece indicar que esas transformaciones de los últimos veinte años configuran una nueva fase o nuevo período del capitalismo imperialista. Sea como sea, está fuera de discusión que estamos ante inmensos cambios estructurales de la economía mundial.
El término "globalización" (comenzó a ser utilizado en las business schools de Harvard, Columbia, Standford y otras universidades de EEUU a principios de los `80) es criticado desde distintos ángulos, por varios economistas marxistas, especialmente europeos, como por ejemplo François Chesnais, que prefieren usar la palabra "mundialización", reservando el término "globalización" para la transformación de las finanzas.
Entre otras críticas, se señala que la palabra "globalización" es conceptualmente mucho más vaga que "mundialización", y sobre todo que ha sido impregnada de falsedades ideológicas. Se la suele presentar engañosamente como un "progreso". Por ejemplo, invocando la "magia" de los avances tecnológicos, se afirma que está naciendo un mundo "homogéneo", "sin fronteras" y "stateless" ("sin Estados").
A los pueblos de países atrasados y colonizados, como México, Brasil o Argentina, se les dice que subiéndose al tren de la "globalización" van llegar al "primer mundo".
La "globalización" sería, entonces, un gran avance, aunque sean imprescindibles algunos "sacrificios" iniciales para "adaptarse. Y que, de todos modos, nos gusten o no, hay que resignarse y aceptarlos.
Estas son ideologías que emplean universalmente los gobiernos, el gran capital, y sus agentes, como la burocracia sindical, para justificar las "desregulaciones", las privatizaciones, la "flexibilidad" del trabajo y los despidos, la liquidación del "Estado providencia" y de las conquistas sociales.
Aunque las definiciones de Benjamín Coriat tiene puntos a tener en cuenta, preferimos la terminología empleada por F. Chesnais, en su libro " La mondialisation du capital"; es decir, usaremos la palabra "mundialización" para designar de conjunto al actual fenómeno de internacionalización del capital y el término "globalización" para el proceso de las finanzas.
Por su parte, Benjamín Coriat formula las siguientes definiciones, haciendo además una periodización a tener en cuenta:
"La globalización puede ser entendida como una nueva fase de la internacionalización de los mercados, que pone en dependencia recíproca a las firmas y a las naciones en grados absolutamente originales e inigualados en el pasado. Podemos decir que es una tercera fase de la internacionalización de los mercados"Benjamín Coriat.
La primera fase puede definirse como Internacionalización y va desde el fin del siglo XIX hasta antes de la Segunda Guerra Mundial [1939/45]. El punto importante es que los Estados Nacionales poseen el status de estados soberanos y poseen todos los atributos de la soberanía económica, comenzando por el primero: emisión de la moneda, definición de la tasa de cambio, control de los intercambios aduaneros. En resumen: hay soberanía económica e intercambio internacional de productos. En ese sentido, hay internacionalización a partir del Estado-Nación. Insisto sobre este punto, porque en la globalización todo el mundo, no solamente la Argentina, también Francia, pierde elementos de soberanía económica .En este período es en donde encontramos el auge del modelo de producción fordista.
La segunda fase es la de la Mundialización que va desde el fin de la Segunda Guerra hasta alrededor de los años '70. Es la época en la cual las firmas multinacionales comienzan a operar sobre una verdadera base mundial... sobre una base plurinacional, utilizando las diferencias nacionales para maximizar sus equipos de producción y su producción.
La tercera fase es la nuestra... Es la aceleración de la tendencia anterior pero con un cierto número de características nuevas. Benjamín Coriat afirma que hay tres cosas totalmente nuevas:
La primera cosa y la más importante, la que incluso ha dado su nombre a la globalización en los inicios, es la globalización financiera y la desregulación general de los mercados financieros... la puesta en conexión de todas las plazas financieras y el nacimiento de intermediarios privados que utilizan medios telemáticos ha globalizado el mercado financiero mundial. Las plazas financieras han sido puestas en dependencia recíproca, completa, con efectos instantáneos e inmediatos... Esto es algo totalmente nuevo y aquí hay pérdidas de soberanía económica.
La segunda gran característica de la globalización es que al mismo tiempo que el mundo se globaliza, también se regionaliza. O sea, formación de tres bloques (NAFTA, Bloque Asiático, Bloque Europeo), que constituyen la llamada Tríada.
La tercer gran característica de la globalización es más cualitativa. Es el fin de la hegemonía del modelo norteamericano de organización de las empresas. En la globalización llegan al mercado mundial nuevas culturas de empresas, nuevos savoir-faire, nuevos modelos organizacionales.
Con la globalización financiera, con la conformación de oligopolios mundiales, con las tendencias a la internacionalización de la producción de bienes y servicios y demás rasgos del capital mundializado, la economía mundial determina cada vez más directamente, con menos mediaciones y mediante nuevas formas, el conjunto de las operaciones de las economías nacionales.
Los Estados no están más en situación de arbitrar ante su propia economía. La libre circulación de capitales ha dado al dinero un poder superior a la voluntad individual de los Estados.
Económicamente, la cara más visible de la crisis de los Estados es la crisis de las finanzas públicas: déficits exagerados, graves endeudamientos, en los Estados más atrasados, se han sucedido las bancarrotas, las cesaciones de pagos, hiperinflaciones, destrucción de la moneda que emitían, desregulaciones y privatizaciones generalizadas, desmantelamiento de los sistemas de bienestar social (seguros de desempleo, salud, educación, jubilaciones, etc) y liquidación de las "leyes sociales". Tendencias a la mercantilización de las actividades y servicios del Estado; amén de transformaciones en el sistema mundial de Estados con las consecuentes crisis de los Estados-Naciones. Endeudamiento y crisis fiscales.
Se atribuyen las culpas al "Estado de bienestar social", con su exceso de empleados públicos y de gastos "improductivos" y "demagógicos", tales como seguros de desempleo, jubilaciones, "excesivos" gastos de salud pública, subsidios a los sectores más pobres, educación gratuita. Las crisis financieras tienen raíces más importantes que el solo gasto "social" en los "pobres".
En América Latina, por ejemplo, los estallidos financieros de los Estados, que se han venido sucediendo desde hace casi dos décadas, no se debe a que se ocupen mucho de los desamparados; en estas crisis han sido decisivas las deudas externas, el saqueo de los Estados por las burguesías nativas y las multinacionales, etc.
Los cambios de las funciones económicas de los Estados reflejan la hegemonía conquistada por el capital-dinero mundializado, por el capital usurario-especulativo.
Una de las mentiras hoy más difundidas es la de que el Estado, en esta etapa de privatizaciones y desregulaciones, deja de intervenir en las actividades económicas (por haberse mostrado "ineficiente") y devuelve estas funciones a los ciudadanos privados y al "mercado", supuestamente más "eficaces". Según este cuento de hadas, antes había "más Estado" y ahora habría "menos Estado", "menos intervención estatal".
En verdad, ni por un segundo, los Estados (por supuesto, en primer lugar, los imperialistas, que son los que cuentan económicamente a escala mundial) quieren o pueden dejar de intervenir en la economía ni de cumplir un rol económico, como una función fundamental del Estado moderno. Lo que ha cambiado es cómo intervienen en la economía.
El "Estado-plan keynesiano" ha dejado paso al Estado ocupado en implementar los mecanismos requeridos por el capital mundializado. Por ejemplo, las intervenciones del Estado en la economía bajo Reagan y Thatcher fueron un factor indispensable y decisivo para poner en marcha el mercado financiero global.
El llamado "modelo neoliberal" parecería ser el correspondiente a esta etapa de la mundialización del capital (como en la anterior fue el modelo keynesiano).
Haciendo estas salvedades, podemos señalar algunos rasgos generales:
Servicio de la deuda pública como uno de las tareas principales del Estado, en función de la cual se diseñan los presupuestos y la estructura del mismo Estado (búsqueda del "equilibrio fiscal").
Tendencia a disminuir los impuestos a los capitalistas pretexto de "estimular la inversión" y cargar el fardo fiscal sobre los pobres (reformas impositivas de Reagan, Poll Tax de Gran Bretaña).
Desregulaciones y privatizaciones generalizadas. Tendencia al desmantelamiento de los sistemas de bienestar social (seguros de desempleo, salud, educación, jubilaciones). Liquidación de las "leyes sociales" de protección al trabajador y "desregulación" o "flexibilización" de las relaciones laborales.
Tendencias a la mercantilización de las actividades y servicios del Estado.
Las privatizaciones generalizadas, que después de la Thatcher se impusieron como modelo en todo el mundo, obedecen tanto a los problemas financieros de los Estados como a los apetitos del capital privado que en esta etapa de crecimiento lento exige que se hagan "productivas" de ganancias privadas, actividades que no lo eran directamente.
El mismo criterio con muchas diferencias en los distintos países se aplica no sólo a las empresas del Estado, sino también a sectores que antes constituían servicios del Estado, frecuentemente gratuitos, por ejemplo, educación, salud pública, jubilaciones, servicios sociales, carreteras, etc.
La línea es mercantilizar esos y otros servicios del Estado: privatizar y/o arancelar la salud pública, imponer sistemas de jubilación privada, arancelar la educación pública y ampliar su sector privado, etc. O sea, hacer producir ganancias a actividades que antes eran servicios del Estado y también, en alguna medida, conquistas sociales.
Tomándose de los déficits presupuestarios y atribuyéndolos falsamente al "derroche" de gastos sociales y/o al "exceso de empleados públicos" se ha hecho universal en esta fase del capitalismo la consigna de liquidar el "Welfare Sstate"- el Estado de Bienestar Social o "Estado providencia-. Es decir, desmontar lo más posible los sistemas de servicios sociales y seguridad social (desempleo, salud, jubilaciones, educación) que desde la post-guerra se generalizaron mundialmente, en parte como conquistas o concesiones a los trabajadores y en parte como mecanismos anti-cíclicos.
Pero, al hacer esto, los Estados se han embarcado en un camino peligrosísimo. Los Estados pierden capacidad como "amortiguadores" sociales de las consecuencias de la mundialización (pobreza, marginalización, analfabetismo, hambre).
Con frecuencia se olvida que esta internacionalización es ante todo del capital (o, con más precisión, del gran capital): mientras éste aparece cada vez más estructurado internacionalmente a escala mundial y relativamente "liberado" de los marcos nacionales y las instituciones estatales que encuadraban y regulaban sus actividades, el "trabajo" sigue aprisionado en esos marcos nacionales, lo que ha dado al capitalismo ventajas apreciables.
Fue un acierto comprender que desde fines de los sesenta (y, con más nitidez, a partir de la crisis petrolera de 1974/75) había finalizado el boom de postguerra y se había desatado una "ofensiva total y generalizada" del capitalismo para recuperar la tasa de ganancia, señalando a estos hechos como la clave de la realidad mundial.
Pero, en el marco del capitalismo, las innovaciones tecnológicas y organizacionales del trabajo son formas que se llenan de otro contenido: se constituyen en formas o medios con que el capital acrecienta la explotación del trabajo y también el dominio sobre los trabajadores.
Paralelamente a estas innovaciones tecnológicas, el capitalismo desarrolló innovaciones no menos amplias en la organización del trabajo. Las diferentes combinaciones de estos factores han engendrado cambios muy importantes en las relaciones sociales de producción, es decir, en las formas de explotación y sometimiento de los trabajadores, que han tenido, a su vez, consecuencias trascendentales sobre la clase trabajadora como tal y sobre el movimiento obrero-sindicatos-.
En primer lugar, se han desarrollado nuevos modelos de producción distintos del modelo norteamericano taylorista-fordista, que hasta hace poco era de vigencia universal.
Sin que de ninguna manera el modelo taylorista-fordista haya desaparecido (aunque se ha ido transformando), se han desarrollado otros sistemas de trabajo alternativos:
En condiciones de acumulación flexible, sistemas de trabajo alternativo pueden existir lado a lado, en el mismo espacio, de manera que permite a los empresarios capitalistas escoger a voluntad entre ellos. El mismo modelo de camisa puede ser producido por fábricas de gran escala en la India, por el sistema cooperativo de Italia, por explotadores [del sector informal] de Nueva York o por sistema de trabajo individual en Hong Kong.
El toyotismo es uno de esos sistemas de producción, pero no el único. En la actualidad, entonces, a escala mundial e incluso en cada país, coexisten esos variados sistemas o mezclas de ellos, de acuerdo a las condiciones de las ramas y/o el país.
En segundo lugar, hay que subrayar que el taylorismo-fordismo, cuando regía como casi único sistema productivo en todo el mundo, uniformaba los métodos de extorsión de trabajo excedente, y así contribuía a homogeneizar a la clase trabajadora, al mismo tiempo que tendía a agrupar en grandes fábricas a importantes masas de obreros, unidos como un ejército de la producción en masa y en serie, con una rígida jerarquía y disciplina verticales. Involuntariamente, la burguesía, al imponer esas condiciones materiales de producción, contribuía a la unidad obrera, a fortalecer su poder y a forjarle una conciencia común, de clase, aunque fuera sólo sindicalista. A esas bases materiales de la producción, se correspondía el convenio colectivo común a toda una rama de la industria, el sindicato único por industria.
En el contexto político mundial de postguerra, cuando el capitalismo tenía un razonable sentimiento de temor a la amenaza de revolución socialista, esto facilitó a las grandes concentraciones obreras de Europa occidental, EEUU e incluso de varios países de América Latina logran una serie de conquistas, tanto directamente de las patronales (salarios, estabilidad, normas de los convenios) como de los Estados burgueses (sistemas de seguridad social, salud, jubilación).
Es hoy ya peligroso atribuir al trabajo únicamente la capacidad de fomentar la cohesión social.
La sociedad sufre el hecho de que el trabajo ha sido expulsado de la posición central que debería ocupar en la economía, en la sociedad y en la vida de la gente.
Tercera Parte
9.-Nuevas procesos en los Modos de Producción. Posfordismo y sus diferentes derivaciones.
9.1.- Fragmentación del Proceso Productivo.
Las nuevas formas de organización de la producción son invariablemente modificaciones de formas preexistentes, adaptadas a los nuevos requerimientos de este mundo competitivo.
Se producirá un cambio organizativo del modo de producción vigente que facilitará el desarrollo de la fragmentación del proceso productivo , la transformación del sistema basado en la gran fábrica hacia las pequeñas unidades de producción independientes y coordinadas; la innovación tecnológica de la informática y de la electrónica permitiendo lograr máxima flexibilidad respecto a los procesos productivos y a los tipos de herramientas que pueden utilizarse integrando procesos distintos por su naturaleza y localización; descentralizándose en lugares diferentes las fases del proceso productivo sin perder la posibilidad de centralización de las funciones de control.
Esta es una nueva disciplina de control y regulación de la fuerza de trabajo cuyo objetivo es hacer que este capital variable varíe con la necesaria intensidad y regularidad para mantener a flote y en su máxima expresión el excedente empresarial.
9.2.- El Modelo "Toyotista". Sus orígenes y características.
El modelo " Toyotista" (7) es tomado como modelo por Occidente a finales de los setenta como consecuencia de un decenio de caídas en el crecimiento de su productividad y en el rendimiento de sus exportaciones a diferencia del extraordinariamente veloz crecimiento de los fabricantes japoneses , especialmente de electrónica y automóviles lo cual comenzó a generar múltiples intereses en Occidente debido primordialmente a la flexibilidad en sus respuestas a las demandas y oportunidades del mercado sin dejar de tener en cuenta sus innovaciones en el diseño del producto.
Este modelo toma como principios orientadores los siguientes elementos:
Una producción orientada por la demanda -Just in Time / Total Quality Control-. "JIT". Modelo surgido en la época de la posguerra a través de los intentos de algunos fabricantes de automóviles japoneses – especialmente Toyota- de amoldar prácticas Occidentales a las condiciones japonesas con la consecuente adaptación debido a que el mercado de Japón al ser restringido en el número de habitantes y consumidores no permitiría una producción a gran escala. .
(7)Taichi Ohno, ingeniero de producción de Toyota y máximo responsable del desarrollo del JIT (Just In Time/Total Quality) inició experimentos en 1948 y lo extendió gradualmente por la compañía hasta que a mediados de los cincuenta ya lo habían empezado a adaptar los primeros proveedores. Este toma como modelo varios aspectos que caracterizaron al modelo occidental entre uno de ellos encontramos los "Círculos de Calidad" procedentes de EEUU introducidos por asesores comerciales norteamericanos durante la ocupación Norteamericana en Japón
b) La producción centrada en la flexibilidad (polivalencia y trabajador multifuncional).
La característica más asombrosa de todo el sistema es que en lugar de producir al máximo volumen en grandes tiradas para anticiparse a la demanda, lo esencial del sistema JIT es que el trabajo se hace sólo cuando hace falta en las cantidades necesarias y en el momento preciso.
Este sistema confía en la estrecha vigilancia de la dirección, la cooperación y la superposición de la propiedad. Combinando las ventajas organizativas de la integración vertical sin las obligaciones financieras.
c) Trabajo realizado en equipo (horizontalización).
Plantilla laboral más cooperativa y participativa. Se espera de los trabajadores que efectúen su propio mantenimiento preventivo y asuman alguna responsabilidad en cuanto a buscar un remedio si surge un problema. El círculo de calidad no es sólo para reducir el desperdicio debido a defectos sino para Asegurar una participación activa y racionalizar el proceso de trabajo.
d) Intensificación del trabajo (ritmo).
La "Autonomación" incrementa la intensidad del trabajo porque significa que no hay que estar pendiente de las máquinas, tras poner una máquina en marcha , el trabajador puede pasar a otra en lugar de esperar a que termine la primera. Los trabajadores reciben formación para poder cambiar entre tareas cómo y dónde haga falta , ayudando así a compañeros que se encuentren sobrecargados de trabajo.
e) Flexibilización del trabajo (derechos flexibles).
El empleo fijo para toda la vida es algo que no hay en el sector de los subcontratistas y cuanto más bajo sea el nivel del trabajo subcontratado , mayor es la proporción de trabajadores y menores salarios y desde luego los salarios en este sector pueden llegar a ser un 40% más bajo que en las empresas principales sin contar con las diferencias en cuanto a la seguridad social.
f) Eliminación, organización autónoma de los trabajadores. Por un lado, en el modelo toyotista, el sindicato, asimilado a la empresa, queda convertido en un anexo de la oficina de personal, parte integral de la organización productiva de la fábrica. El viejo sindicato, por otra parte, ya no abarca ni de lejos a los trabajadores de la rama; los contratados, temporarios, "tercerizados" o subcontratados aunque trabajen en la misma fábrica que los efectivos (permanentes), no pertenecen al sindicato. Fuera de la organización sindical quedan también las masas de desempleados. Las burocracias sindicales, en vez de reorganizar los sindicatos de acuerdo a esa nueva realidad estructural para abarcar a los nuevos sectores fragmentados de la clase trabajadora y poder enfrentar así la ofensiva del capital, han hecho lo contrario; se han adaptado y capitulado por completo frente a las transformaciones de la mundialización. Se han convertido en sus mejores colaboradores e instrumentos.
En numerosos países, muchos sindicatos asumen actividades empresarias y/o se asimilan a la estructura de las gerencias de personal de las grandes empresas, pasando a ser parte del toyotismo, parte fundamental de la organización productiva de la empresa.
Por ejemplo: el hecho de que hoy en EEUU, en las 500 firmas más grandes, sólo el 10% de la fuerza laboral es de pleno empleo o de empleo permanente, determina una relación mucho más favorable para la burguesía, en comparación con las épocas de empleo completo, permanente y estable. (Datos de César Altamira, Hacia una revolución en el trabajo (para combatir el desempleo), Realidad Económica, Buenos Aires, ago/sep/95)
g) Unidad productiva pequeña siendo los pedidos pequeños y frecuentes, haciéndose varias entregas al día y por ende la proximidad de los proveedores es fundamental.
Con el "JIT" uno de los objetivos básicos es la reducción del tiempo que se tarda en poner en marcha las máquinas; su logro se ve facilitado en gran medida por la estrecha relación, corriente en Japón, entre la dirección, los ingenieros y los trabajadores de planta. Las empresas se caracterizan por usar varias máquinas pequeñas y sencillas en vez de una máquina grande y sofisticada para que haya más flexibilidad.
h) Método sofisticado de aprendizaje mediante la acción.
9.3.- Consecuencias del Modelo Productivo JIT en el nuevo contexto social y productivo.
Implicancias del sistema "JIT" en el proceso laboral y sus consecuencias para el trabajador:
Dado el aumento de la producción por trabajador es probable que los efectos sean negativos sobre el empleo, tanto directo como indirecto siendo igual otros factores como la demanda.
La reducción de los "tiempos muertos" de la jornada laboral mediante la eliminación del tiempo improductivo y el requisito de que los trabajadores cambien continuamente de un trabajo a otro, mas la interiorización de la presión disciplinaria dentro de los grupos de trabajo aumenta la intensidad del trabajo y el estrés asociado.
Flexibilidad numérica externa. El número de empleados se ajusta a las necesidades
Las prácticas de externalización. Parte del trabajo de la firma es puesto afuera en empresas o individuos que no son parte del conjunto de los trabajadores contratados.
Flexibilidad numérica interna. El número de horas de trabajo es ajustado en línea con las necesidades pero el número de trabajadores se mantiene sin cambiar.
Flexibilidad funcional. La asignación de puestos de trabajo es modificada de acuerdo con las necesidades
Flexibilidad salarial. Los costos del trabajo y los salarios son ajustados.
La flexibilidad implica la multiplicidad de capacidades y la eliminación de la demarcación, más la reducción o abolición de las descripciones de puestos de trabajo. Para facilitar esto en el caso de que los sindicatos estén permitidos es probable que sólo se reconozca a un sindicato y que este se encuentre dentro de la propia estructura de la empresa..
Pagos individualizados a discreción y por méritos en vez de una tarifa para cada empleo a fin de facilitar la flexibilidad.
Fomento de las "Capacidades del Comportamiento" siendo estas más importantes que las capacidades técnicas ya que se espera del trabajador que tome muchas más decisiones que en los métodos tayloristas.
Inestabilidad laboral, a excepción de los "Trabajadores Centrales" (Core Workers) con la condición de que estén dispuestos s ser reubicados en el puesto de trabajo en donde sean necesarios.
.Como el sistema JIT es un sistema de alta confianza han de encontrarse maneras de motivar a los trabajadores para tomar decisiones de un modo aceptable, sin usar la fuerza colectiva en contra del capital. Se prefieren por lo tanto los sistemas individualizados de comunicación entre dirección y trabajadores en vez de recurrir a capataces o representantes sindicales como intermediarios
Lo esencial del Toyotismo, según Satoshi Kamata en su libro "Japan in the passing lane -un reportaje clásico sobre Toyota-" es lo que él mismo caracterizó como "la fábrica de la desesperación".
¿Qué significa esto?
El principal objetivo del toyotismo fue reducir el "desperdicio". De modo hiperbólico: si el trabajador respiraba, y en cuanto respiraba durante algunos momentos no producía, lo urgente entonces era encontrar el modo de que pudiera producir respirando y respirar produciendo, pero nunca respirar sin producir. Es decir, si el trabajador pudiese producir sin respirar, el capital lo permitiría; pero respirar sin producir, no. Basándose sobre este modo de razonar, Toyota consiguió reducir en un 33% el "tiempo ocioso" o el "desperdicio" en sus procesos de fabricación. Por este motivo, la industria automovilística japonesa, que en 1955 producía un volumen de automóviles irrisorio frente a la producción estadounidense (solamente 69 mil unidades frente a las 9,2 millones de los EUA), llegó a superarla 20 años después.
La industria japonesa había hallado el modo de llevar la productividad hasta la cima. Entonces los capitalistas japoneses llamaban a los capitalistas norteamericanos y les decían: "ustedes tienen obreros lentos, su sistema de producción es lento, y tienen que reaprender de nosotros". E incluso: "nosotros aprendimos con ustedes, el toyotismo no es una creación original japonesa: se inspiró en el modelo de los supermercados, la industria textil. etcétera".
9.4.- ¿"Calidad Total" o fomento del despotismo contra si mismo y sus semejantes?
De modo que actualmente no se ve el fin del trabajo; lo que se ve es el retorno a niveles alarmantes de explotación del trabajo, de intensificación del tiempo y del ritmo de trabajo. La jornada puede incluso reducirse mientras el ritmo se intensifica. Y es exactamente eso lo que viene ocurriendo en todas partes: una mayor intensidad del ritmo de trabajo; un mayor grado de explotación de la fuerza humana que trabaja.
En el toyotismo el trabajador se torna un déspota de sí mismo. Es instigado a recriminarse y a castigarse en tanto su producción no alcance la llamada "calidad total" (esa falacia mistificadora del capital). Se trabaja con fuerte sentido colectivo, en equipos o células de producción, y si un trabajador o una trabajadora no comparece al trabajo, por ejemplo, serán los mismos compañeros de equipo quienes se encarguen de su castigo. Este modo de actuar es parte del ideario del toyotismo.
Según su particular lógica, las resistencias, las rebeldías, cualquier tipo de rechazo hacia la autoridad son considerados actitudes contrarias "al buen desempeño de la empresa".
Lo que el toyotismo pone en práctica se trata de un compromiso manipulado. Un momento efectivo del extrañamiento del trabajo o, si se prefiere, de la alienación del trabajo llevada al límite, interiorizada en el "alma del trabajador", quien en este contexto sólo debe pensar en la productividad, en la competitividad y, en suma, en cómo mejorar la producción de la empresa, su "otra familia"; el trabajador piensa para el capital así lo requieren el toyotismo y sus variantes.
El capital toyotizado incentiva esta instancia a fin de apropiarse de la fuerza de trabajo en una dimensión mucho más profunda que el taylorismo y el fordismo. Sólo con este propósito es que el capital deja, durante cierto período cada semana (en general una o dos horas), que los trabajadores permanezcan aparentemente "sin trabajar", discutiendo en los "círculos de control de la calidad". Porque es durante estos momentos cuando florecen las ideas de quienes llevan a cabo la producción -incluso superando las expectativas de los patrones proyectados por la "gerencia científica"-; el capital toyotizado sabe apropiarse activamente de esta dimensión intelectual del trabajo que emerge en el piso de la fábrica y que el taylorismo-fordismo ha despreciado. Evidentemente, en tanto estos fenómenos se intensifican y se hacen más complejos en los sectores de punta del proceso productivo (aunque hoy tal hecho no pueda generalizarse en hipótesis alguna), de ellos resultan máquinas más inteligentes, que a su vez precisan de trabajadores más "calificados", más aptos para operar mecanismos informatizados. Pero de aquí resultan nuevas máquinas, más inteligentes aún, capaces de realizar actividades antes exclusivas de los hombres, desencadenándose así un proceso de interacción entre trabajo vivo altamente diferenciado y trabajo muerto cada vez más informatizado.
Pero, la peor consecuencia es que tienden a acrecentar la sumisión de los trabajadores de conjunto, empujan a la fragmentación de los trabajadores, dentro y fuera de la empresa, y a imponer el principio disgregador de la competencia y rivalidad contra el principio de la solidaridad de clase: rivalidad y competencia entre trabajadores de distintas empresas, entre efectivos y contratados, entre trabajadores centrales y tercerizados, entre ocupados y desocupados, entre nativos y extranjeros... y, por último, rivalidad y competencia individual de cada trabajador contra el compañero que tiene al lado.
9.5.- Heterogeneidad, complejidad y fragmentación de la clase trabajadora. La influencia de la Educación en este proceso.
Se ha verificado una desproletarización del trabajo industrial fabril, en otras palabras, ha habido una disminución de la clase obrera industrial tradicional; pero paralelamente, se ha efectivizado una notable expansión del trabajo asalariado, a partir de la enorme ampliación del sector servicios. Se ha verificado una significativa heterogeinización del trabajo, se vivencia también una subproletarización intensificada, presente en la expansión del trabajo parcial, temporario, precario, subcontratado, "tercerizado".
La nueva calificación, parece estar orientada al aprendizaje en el trabajo y no a una adquirida previamente en la educación escolarizada.
La calificación puede ser definida en atención a los siguientes elementos:
Los atributos del individuo
Las exigencias del propio puesto de trabajo
La estrategia organizativa Las empresas estructuran sus puestos de trabajo de acuerdo con las exigencias de la producción y a su principio de organización del trabajo.
La calificación esta determinada con la estructuración de lo mercados internos de trabajo y con condiciones mas generales derivadas de los mercados de trabajo regionales
Otro ámbito que asume un nuevo papel en este proceso de reestructuración industrial y del cual se reclama un ajuste a los nuevos requerimientos en las calificaciones, es el educativo dentro de las políticas de sustitución de importaciones se fortalecen y apoyan escuelas técnicas y de capacitación, así como bolsas de trabajo con apoyo estatal. Generalmente las grandes empresas deciden poner sus propios establecimientos de capacitación. Pero pocos esfuerzos se hacen para vincular al sector educativo y al industrial.
Con el nuevo cambio se busca volcar esa ecuación. La educación y la capacitación son parte del corazón mismo de los sistemas antropocéntricos de producción.
Para que este proceso se pueda llevar a cabo son necesarias la implementación de las siguientes medidas educativas:
Educación y capacitación para una vida de aprendizaje
Aprender haciéndolo
Educación abierta
Fomentar una psicología para que la gente sepa aprender a través de la cambiante tecnología de los medios
Enseñanza amplia de habilidades y conocimientos
Incrementar los vínculos entre la industria y el sector educativo.
El éxito de la reestructuración industrial depende en gran medida del factor humano. La mayor competitividad (medida a través de la relación calidad-costos de producción – entrega a tiempo) se basa en la implementación de políticas y estrategias gerenciales específicas (tecnológicas, organizativas y ocupacionales) y del apoyo directo e indirecto que ofrecen los gobiernos. Para ello es menester contar con una mano de obra capaz de materializar las nuevas filosofías en el trabajo y desarrollar las actividades específicas, las cuales requieren una mayor colaboración, participación, responsabilidad y autonomía en el propio proceso de trabajo.
Los procesos de internacionalización de las actividades económicas en general y de la producción en particular, como por ejemplo la "deslocalización", han dado ventajas adicionales al capital sobre el trabajo.
Como señalamos al principio, la clase trabajadora de todos los países sigue moviéndose en los marcos de sus Estados Nacionales, dentro de los cuales, en la etapa anterior, pudo obtener, gracias a luchas y presiones, conquistas y leyes sociales que le permitían una cierta defensa contra los capitalistas más voraces. Pero esto, sumado a acción de los aparatos burocráticos que liquidaron el internacionalismo obrero, terminó siendo un obstáculo para que pudiera ver y actuar más de allá de la jaula asfixiante del Estado Nacional. Esta contradicción se hace cada vez más trágica, porque paralelamente el capital logró internacionalizar cada vez más sus operaciones.
Finalmente, el nuevo paradigma no se define en la fábrica, sino en las condiciones globales y por tanto esencialmente sociales en las que se determinan las formas de cooperación e innovación. El imperativo de optimización global de los flujos (el "just in time") así como las fórmulas organizativas que aseguran la recomposición de los momentos de concepción y fabricación o, por último, la inversión de la jerarquía tradicional entre firma y mercado, no representan sino conceptualizaciones diferentes de un mismo movimiento: el que va de la fábrica a la sociedad, de las condiciones productivas de fábrica a las de cooperación social.
Cuarta Parte
10.- CONCLUSIONES
Una de las primeras preguntas que hacemos, por lo general a un sujeto ni bien lo conocemos es a qué se dedica, en qué trabaja, esto viene a referencia de hacer notar que demostrado estadísticamente la respuesta a esta pregunta tiene un importante carácter estructurante para todo ser que habita en nuestra sociedad contemporánea.
El ser humano se estructura hoy en día, arma su vida y sus proyectos en función del trabajo que tiene y de las expectativas que despierta en él.
Aquel que no posee trabajo es un ser excluido del mundo contemporáneo, el cual se rige y se guía solamente por el consumo dejando fuera aquel que no tiene poder adquisitivo alguno.
El Valor del trabajo se mantiene dado en tres registros:
1.-El registro económico, el del valor del intercambio, del trabajo considerado como un bien material
2.-El registro topológico, el del lugar que ocupa en un sistema de distribución social de las actividades y de los grupos –
3.-El registro simbólico, el de los significados sociales y del sentido personal atribuido al trabajo.
Más allá de la centralidad social dada al trabajo- valor en sentido topológico- se plantea la cuestión de centralidad simbólica. Esta última se declina a su vez en dos planos- social significados y valores atribuidos desde un punto de vista social al trabajo y subjetivo- sentido personal dado.
Las encuestas relativas a los valores y significados dados al trabajo y al empleo, como enfoques clínicos del trabajo, nos dicen que este aparece en segundo valor, justo después de la familia y por muy delante de los amigos, el ocio y la religión además se espera mucho más del trabajo que en el pasado como modo de realización de uno mismo y de existencia social y desempeña una función importante en las regulaciones psíquicas.
La creciente subordinación de la fuerza de trabajo a los movimientos del capital es el vector más poderoso – frente a la fragilización de los vínculos familiares- del resurgir de los fenómenos de pauperización y de desafiliación.
Hoy día, en apariencia, los mundos extra-laborales se han vuelto más importantes en la constitución de identidades para los trabajadores que el trabajo mismo, a pesar de su condición fundante para poder realizar estos procesos posteriores. En particular, el mundo del consumo es más relevante, genera mayores satisfacciones, la sociedad posmoderna sería la fragmentación de los mundos de vida, del yo, de la cultura, de las identidades, el vivir en el presente de la ausencia de sujetos hegemónicos o discursos y proyectos globales.
El fomento del autoempleo se ha extendido mucho como forma de precariedad más que como búsqueda de satisfacciones y enriquecimiento de las tareas o flexibilidad creativa, como algunos sostienen. La mayoría de los auto-empleados puede considerarse como trabajadores precarios. Este trabajo no es por decisión propia sino por una cuestión de abandono del Estado de regular y fomentar un área tan importante para el crecimiento como sociedad.
El "Fordismo" se caracterizaba por la existencia de un tiempo lineal, lo cual repercutía en el sujeto ya que le brindaba la posibilidad cierta de mirar hacia delante sabiendo que contaba con un trabajo estable y una seguridad social brindada por el Estado que le garantizaba una existencia tranquila.
Estos sujetos tenían la posibilidad de predecir lo que iba a suceder y debido a la situación social en la cual se desenvolvían tenían esperanzas de poder ascender en la pirámide social.
Debido a esto, se conformaban Yoes estables esencialmente como resultado del conocimiento de la función que cumpliría cada sujeto en el rol que le era asignado (Trabajo, Familia, etc.)
La crítica que se la hacía a este sistema era que tenía la capacidad de embotar la mente (A.Smith "La riqueza de las Naciones") debido a lo rutinario de la labor desempañada por todos los obreros, al contrario de lo que afirmaba Diderot (Enciclopedia) que sostenía que ".El hombre al dominar la rutina y sus ritmos lograban dominar su trabajo y la tranquilidad necesaria para una vida pacífica".
El tiempo rutinario se había convertido en una arena en la cual los trabajadores podían hacer valer sus reivindicaciones: en definitiva, una arena para la adquisición de poder. La rutina, en definitiva, podía degradar pero también proteger, podía descomponer el trabajo pero también componer una vida
A.Giddens, sostiene que "Imaginar una vida de impulsos momentáneos de acciones de corto plazo, desprovista de rutinas sostenibles, una vida sin hábitos es imaginar una existencia sin sentido".
El "Posfordismo" de la mano de la flexibilización exige nuevas maneras de organizar el tiempo y en especial el tiempo del Trabajo, no existiendo ya nada a largo plazo (en el ámbito del trabajo- la carrera no existe más o de existir se debilita- como en el ámbito de la vida cotidiana).
En lugar de organizaciones con estructuras piramidales, las direcciones de las empresas como el Estado prefieren ahora las organizaciones en redes ya que resulta más fácil y más rápido desmontarlas o redefinirlas que los activos fijos de las jerarquías. Los ascensos y los despidos tienden a no estar estipulados en normas claras y fijas, como tampoco están rígidamente definidas las tareas, la red define constantemente su estructura.
El principio de "Nada a largo Plazo" corroe la confianza, la lealtad y el compromiso mutuo;
para hacer frente a las realidades actuales, el desapego y la cooperación superficial son una mejor armadura que el comportamiento basado en los valores de lealtad y servicio.
El pensamiento empresarial requiere gente que se sienta cómoda sin calcular las consecuencias del cambio o que no lo preocupe que ocurrirá a continuación.
El tiempo ya no es lineal sino que se encuentra desarticulado amenazando la capacidad de la gente de consolidar su carácter en narraciones duraderas .Los Panaderos ya no saben hacer el pan, los torneros ya no saben hacer sus moldes, no se conoce ya el oficio y por lo tanto; el trabajo ya no resulta legible, ya no comprenden lo que están haciendo. Dando origen a una débil identidad laboral que contribuye a formar una endeble identidad de si mismo.
Antes los trabajadores eran los calificados y no las máquinas; por esto su identidad como trabajadores es débil, existiendo un compromiso superficial con el trabajo pues falta el sentido del por qué y para qué estamos haciendo lo que hacemos.
El riesgo a arriesgar se vuelve una necesidad sostenida por las masas. , uno siempre vuelve a empezar no pudiendo construir en ningún momento una base sólida desde donde partir o un puerto seguro a donde arribar.
Las instituciones modernas no son rígidas y claramente definidas, su carácter incierto surge por el hecho de atacar la rutina como objetivo haciendo hincapié en las actividades a corto plazo, creando redes amorfas y sumamente complicadas en lugar de burocracias de estilo militar, en la red la incertidumbre fomenta las oportunidades de movimiento, un individuo puede aprovechar oportunidades no previstas por otros.
El capitalismo Posfordista se caracteriza por una desorientación que implica moverse hacia la incertidumbre, hacia esos agujeros estructurales y esto lo podemos ver de tres maneras diferentes:
Movimientos ambiguamente laterales (movimientos en los que la persona se mueve en realidad hacia un lado aún cuando cree que se mueve hacia arriba en la red flexible) "Movimientos de cangrejos" (Manuel Castells).
Pérdidas restrospectivas: poca información sobre cambio a una nueva posición, sólo retrospectivamente podemos darnos cuenta del equivoco.
Ingresos impredecibles.
La cultura posmoderna se caracteriza porque no moverse es sinónimo de fracaso y la estabilidad parece casi una muerte en vida., por lo tanto el destino importa menos que el acto de partir, quedarse quieto equivale a quedarse fuera del juego, en una sociedad dinámica la gente pacífica se marchita
La flexibilidad es sinónimo de juventud, la rigidez de vejez
Un yo maleable, un collage de fragmentos que no cesa de devenir, siempre abierto a nuevas experiencias; estas son precisamente las condiciones psicológicas apropiadas para la experiencia del trabajo a corto plazo, las instituciones flexibles y el riesgo constante.
El problema al que nos enfrentamos…Ahora… es cómo organizar nuestra vida, nuestra identidad como sujeto participe de un mundo desbocado marcado por un capitalis1mo que dispone de nosotros y nos deja a la deriva con la anuencia de un Estado que se ha olvidado de algunas de sus principales funciones fomentando, en cambio, un "Darwinismo Social" en lugar de buscar beneficios colectivos.
Este Estado encargado de la reproducción de un sistema excluyente para un número cada vez menor de sujetos es hoy el principal aliado de las maquinarias encargadas de llevar adelante estas macabras consecuencias para el mundo en que vivimos.